lunes, 5 de septiembre de 2011

La Cristina Rivera Garza mía de mí



Bajo la influencia musical de The Koln Concert de Keith Jarret, estos cuatro/cinco ejercicios curatoriales sobre tres novelas (Lo Anterior, La Cresta de Ilión y La muerte me da)  y tres libros de poesía (La más mía, Yo ya no vivo aquí y ¿Ha estado usted alguna vez en el Mar del Norte?) reunidos en el volumen Los textos del yo, todos de la escritora tamaulipeca Cristina Rivera Garza, son el resultado de un ejercicio jazzístico de curaduría, el cual consistió en primera instancia en la  revisión exhaustiva de los textos que conforman el blog No hay tal lugar y a partir de ello la selección y extracción de fragmentos; de igual manera la revisión de textos académicos sobre las citadas obras, así como el registro de claves de lectura, referencias e imaginarios; de forma posterior la transcripción de subrayados y frases señaladas con post its y demás marcadores en las lecturas que en su momento efectué de los mencionados libros; y finalmente la intervención, reescritura, yuxtaposición, adición/sustracción, (todo lo anterior realizado directamente en el soporte de un blog creado ex profeso con la siguiente dirección: esagrisuraesetercocallarse.blogspot.com) todo lo anterior realizado bajo el signo de la apropiación, radical o no, de la obra de Cristina Rivera Garza.






domingo, 4 de septiembre de 2011

Un lugar hermoso porque era mío



a) Hay un hombre que vacía y vuelve a llenar una maleta de forma intermitente. Hay también una mujer vacía que coloca piezas de ropa en una maleta pequeñísima. Alguien acaba de morir. Son las 3:20 de la mañana.

b) Hay que hacer trámites y firmar papeles. El mundo es una sala de espera, una aguja, una camilla. 

c) Bajo las sábanas, invisible. 

d) Si mi vida fuera una novela, éste sería el punto de la trama en que, mientras duermes, te hablaría de el hombre amado y de la mujer que tú nunca soñaste para mí. 

e) Aquí cabría la lírica trashumante que nombra, des(a)nuda y desmitifica.

f) Llegaríamos a la orilla exhaustos, como quien construye un escenario para el deshaucio, como quien, doliente, fragua el señalamiento de los límites, la intervención de los límites, el paulatino caer de los límites.

g) El (tercer) mundo era una casa sin techos. 

h) Hay quien regresa al lenguaje como se regresa a un edén fracturado.

i) Lo que en la negación se afirma. Lo que se vuelve afirmación por ausencia. Todo lo que está fuera de registro. Lo marginal. Lo insustancial. Lo extraoficial. Lo incanonizable. Lo terrorífico por minúsculo. Lo poderoso por minúsculo. Lo cotidiano-subvertido. Lo que no perdura. Lo que ni sabiéndolo acomodar cabe.

j) Hay zapatos que se hunden en el lodo. Zapatos de una multitud sin rostro ni destino. Una multitud que es una ciudad, que es un himno. Una multitud que es un yo. 

k) Aquí cabría una lírica tráfica que trafica subrepticia con tus significados y los míos.

l) Si mi vida fuera una novela, éste sería el punto de la trama en que, mientras deambulas, te diría que aquí no hay patria, ni morada, ni refugio. Sería el punto de la trama en que te encontrarías, literalmente, patidifuso.

m) Todas las voces, las esquinas.

n) Aquí cabría una lírica de metafísicas tambaleantes. Aquí cabría sí, preguntarse por el ser, por el lenguaje.¿Quién versifica? ¿Quién versifica al versificador? ¿Quién verifica?

o) [Aquí debería ir algo que no existe y por eso no está]

p) Todos los posibles mundos son hoteles vacíos con recepcionistas viendo repeticiones de peleas de box en televisores blanco y negro. 

q) Si mi vida fuera una novela, éste sería el punto de la trama en que mientras leo un texto sobre la poesía de Cristina Rivera Garza durante el Festival de Letras San Luis 2011, tendría un flash back y recordaría la primera vez la oí leer El Terzo en el Festival Letras en el Golfo en Tamaulipas. Recordaría que antes de eso no conocía su obra literaria y que cuando la escuché leer El Terzo irremediablemente quise leer más, quise saber más de su escritura. Recordaría que todo empieza en realidad por querer saber más.

r) Hay quien mantiene en movimiento las coordenadas del lenguaje y lo hace parecer una coincidencia, pero no.

s) Si mi vida fuera una novela, éste sería el punto de la trama en que, ebrios de madrugada por las calles y en los bares de Tijuana, Marco Antonio Huerta y yo nos preguntaríamos en reiteradas ocasiones: "¿Así que esto era el amor?" Esa grisura. Ese terco callarse.

t) Hay tres mujeres que viajan sin equipaje a Ciudades Sin Nombre, a Otros Países.

u) Aquí cabría la lírica (pro)verbial, una lírica posteada y posmoderna, la bífida lírica de Los Emergidos.

w) Aquí cabría la lírica que [cuando los saqueadores se lo hayan llevado todo y nosotros hayamos perdido todo lo que íbamos a perder (despojados hasta los huesos)] le cantará al desastre.

y) Me dije: si mi vida fuera una novela, éste sería el punto de la trama en que se oiría el ruido -defnitivo, rama que se rompe, ropa que se rasga, accidente sobre columna vertebral de nudillo contra cristal. en este momento debería aparecer bajo las arcadas del balcón, remojada, virulenta y letal. 

z) Hay quien regresa al lenguaje como quien enciende un cerillo.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Sí, una cosa terrible contra los muertos




1. ¿Es una ciudad un cementerio?
1.1 Las fotografías de los cadáveres sobre las calles, abiertos de par en par, desangrados.
1.2 La cabeza de un pequeño pájaro: una suculencia.
1.3. Todo es un cementerio, se sabe.


2. Este es mi primer cadáver
2.1 Vi mi primer decapitado en una carretera de la China. Iba hacia el aeropuerto de Beijing.
2.2. En la televisión seguían dando los mismos noticiarios. Las muertas eran ahora dos muchachas sin nombre, como siempre.
2.2.1Pensé que, de haberse salvado, podrían sentarse ahora mismo y recargar las piernas sobre algo.
2.3 En la televisión seguían dando los mismos noticiarios. Las muertas eran ahora dos reporteras.
2.3.1 Los cuerpos de ambas estaban amordazados y cubiertos por una lona, además presentaban golpes en el tórax.


3. ¡Pero si se trata de un cuerpo!
3.1 La noticia del hallazgo de un par de cabezas a las puertas de una institución a cargo del orden público.
3.2 Lenguajes en que los cuerpos descifran sus relaciones de poder con otros cuerpos.
3.2.1 El cuerpo dolorido habla, pero habla a su manera. Habla entrecortadamente. Titubea. Tropieza.
3.3 Nos acostumbramos a ver cuerpos caídos sobre el asfalto.
3.3.1Hace no mucho amaneció un cadáver dentro de un auto a una cuadra de donde vive una amiga.
3.3.2 Los hombres que colgaban.
3.3.2.1 Ahí donde debería estar el pene y los testículos.
3.4 La pregunta ¿es tu cuerpo?
3.4.1 La respuesta: y el mío.
3.5 Sólo la muerte nos lanza con tanta furia hacia el cuerpo desconocido.
3.5.1 Desvaneciéndose.


4. La Detective del Departamento de Investigación de Homicidios
4.1 Vive sola. Habla sola. Come sola.
4.2 La Detective baila sola. 
4.3 Piensa en los muertos. Uno, Dos, Tres, Cuatro. Piensa en los cadáveres mutilados.
4.3.1 ¿A dónde iban cuando en realidad se dirigían hacia la muerte?
4.3.1.1 ¿Quién se quedó esperándolos?
4.4 Eso es lo que la avergüenza: tener que matar las muertes que examina.
4.5 ¿Por qué querría ser alguien Marina Abramovic?



5. ¿Pero quién en verdad no es una mujer y un hombre al mismo tiempo?
5.1 ¿Un hombre que posa como una mujer?
5.2. ¿Una mujer que posa como un hombre?
5.3 La escena: un hombre, una mujer, la sospecha, el terror, el sexo.
5.4 Te digo que necesito un bosque.
5.4.1 Sólo hace falta un bosque, una niebla.


6. La Viajera con el Vaso Vacío
6.1 Sueño que, dentro de mi sueño, hay alguien como yo con un vaso vacío en las manos.
6.1.1 No sé cómo detener los sueños.
6.1.1.1 No sé si quiero.
6.2 Sus cuerpos están destrozados también en mis sueños.
6.3 ¿No entiendes tú que sólo escribo para ti?
6.4. Me llamo Gina Pane. Y acabo de cortarte.
6.5 ¿Qué mujer que es mujer no es la muñeca?
6.6 Si fuera un vaso vacío lo colocaría aquí, dentro del sexo.


7. El crimen es un lugar al que hay que regresar.
7.1 ¿Qué se necesita para matar un hombre?
7.1.1 No se necesita sino apuntar hacia la noche para matar a un hombre.
7.2 Si ella hubiera sido una sonámbula, él habría podido empujarla hacia el precipicio.
7.3 Si a usted le hubieran matado a un hijo, usted debajo de las piedras buscaba al asesino.
7.4 Alguien se desangra en el monte. Alguien respira, amedrentado. Alguien teme.
7.4.1 La palabra: esquirla. Las palabras.
7.4.1.1 Porque la palabra esquirla. La palabra soldado. La palabra impunidad.
7.5 ¿Quién me está matando?
7.5.1 ¿A quién me estoy entregando para que me mate?


8. ¿Se puede en realidad avanzar de la intemperie hasta la intemperie?
8.1 Su frase de despedida no era una invitación sino una amenaza.
8.2 Una traducción incompleta, sesgada, real.
8.2.1 Una continua interrupción.
8.2.1.1 La palabra des-mem-bra-mien-to.
8.2.1.1.1 El fracaso de todo poema / castrado por su propia lengua.
8.2.2 El lenguaje, que es todo recuerdo y, por serlo, es todo ausencia.
8.3 El lenguaje no carece de violencia.
8.3.1 La violencia no carece de violencia.
8.4 Nadie quiere ser nuestro paisaje; nadie quiere romperse así.


9. El frío pagará, la lluvia pagará, pagará el trueno.
9.1 ¿Cumple alguien la ley?
9.2 ¿Alguien se duele?
9.3 ¿Alguien se llena de sangre o de odio?
9.4 ¿Alguien ejecuta una venganza o una promesa?
9.5 ¿Qué enemigo tendría tanto odio para cometer un acto de tamaña brutalidad, oficial?
9.6 ¿Quién muere una y otra vez, y, luego, otra más?
9.7 ¿Quién carga el peso del muerto sobre los hombros sobre los ojos las manos las uñas los labios?




[Pieza de apropiación radical con textos de Alejandra Pizarnik, Luz María Dávila y Cristina Rivera Garza]

Sí, muertos



1. ¿Es una ciudad un cementerio?
1.1 Las fotografías de los cadáveres sobre las calles, abiertos de par en par, desangrados.
1.2 La cabeza de un pequeño pájaro: una suculencia.
1.3.Todo es un cementerio, se sabe.


2. Este es mi primer cadáver
2.1 Vi mi primer decapitado en una carretera de la China. Iba hacia el aeropuerto de Beijing.
2.2. En la televisión seguían dando los mismos noticiarios. Las muertas eran ahora dos muchachas sin nombre, como siempre.
2.2.1Pensé que, de haberse salvado, podrían sentarse ahora mismo y recargar las piernas sobre algo.
2.3 En la televisión seguían dando los mismos noticiarios. Las muertas eran ahora dos reporteras.
2.3.1 Los cuerpos de ambas estaban amordazados y cubiertos por una lona, además presentaban golpes en el tórax.


3. ¡Pero si se trata de un cuerpo!
3.1 La noticia del hallazgo de un par de cabezas a las puertas de una institución a cargo del orden público.
3.2 Lenguajes en que los cuerpos descifran sus relaciones de poder con otros cuerpos.
3.2.1 El cuerpo dolorido habla, pero habla a su manera. Habla entrecortadamente. Titubea. Tropieza.
3.3 Nos acostumbramos a ver cuerpos caídos sobre el asfalto.
3.3.1Hace no mucho amaneció un cadáver dentro de un auto a una cuadra de donde vive una amiga.
3.3.2 Los hombres que colgaban.
3.3.2.1 Ahí donde debería estar el pene y los testículos.
3.4 La pregunta ¿es tu cuerpo?
3.4.1 La respuesta: y el mío.
3.5 Sólo la muerte nos lanza con tanta furia hacia el cuerpo desconocido.
3.5.1 Desvaneciéndose.


4. La Detective del Departamento de Investigación de Homicidios
4.1 Vive sola. Habla sola. Come sola.
4.2 La Detective baila sola. 
4.3 Piensa en los muertos. Uno, Dos, Tres, Cuatro. Piensa en los cadáveres mutilados.
4.3.1 ¿A dónde iban cuando en realidad se dirigían hacia la muerte?
4.3.1.1 ¿Quién se quedó esperándolos?
4.4 Eso es lo que la avergüenza: tener que matar las muertes que examina.
4.5 ¿Por qué querría ser alguien Marina Abramovic?



5. ¿Pero quién en verdad no es una mujer y un hombre al mismo tiempo?
5.1 ¿Un hombre que posa como una mujer?
5.2. ¿Una mujer que posa como un hombre?
5.3 La escena: un hombre, una mujer, la sospecha, el terror, el sexo.
5.4 Te digo que necesito un bosque.
5.4.1 Sólo hace falta un bosque, una niebla.


6. La Viajera con el Vaso Vacío
6.1 Sueño que, dentro de mi sueño, hay alguien como yo con un vaso vacío en las manos.
6.1.1 No sé cómo detener los sueños.
6.1.1.1 No sé si quiero.
6.2 Sus cuerpos están destrozados también en mis sueños.
6.3 ¿No entiendes tú que sólo escribo para ti?
6.4. Me llamo Gina Pane. Y acabo de cortarte.
6.5 ¿Qué mujer que es mujer no es la muñeca?
6.6 Si fuera un vaso vacío lo colocaría aquí, dentro del sexo.


7. El crimen es un lugar al que hay que regresar.
7.1 ¿Qué se necesita para matar un hombre?
7.1.1 No se necesita sino apuntar hacia la noche para matar a un hombre.
7.2 Si ella hubiera sido una sonámbula, él habría podido empujarla hacia el precipicio.
7.3 Si a usted le hubieran matado a un hijo, usted debajo de las piedras buscaba al asesino.
7.4 Alguien se desangra en el monte. Alguien respira, amedrentado. Alguien teme.
7.4.1 La palabra: esquirla. Las palabras.
7.4.1.1 Porque la palabra esquirla. La palabra soldado. La palabra impunidad.
7.5 ¿Quién me está matando?
7.5.1 ¿A quién me estoy entregando para que me mate?


8. ¿Se puede en realidad avanzar de la intemperie hasta la intemperie?
8.1 Su frase de despedida no era una invitación sino una amenaza.
8.2 Una traducción incompleta, sesgada, real.
8.2.1 Una continua interrupción.
8.2.1.1 La palabra des-mem-bra-mien-to.
8.2.1.1.1 El fracaso de todo poema / castrado por su propia lengua.
8.2.2 El lenguaje, que es todo recuerdo y, por serlo, es todo ausencia.
8.3 El lenguaje no carece de violencia.
8.3.1 La violencia no carece de violencia.
8.4 Nadie quiere ser nuestro paisaje; nadie quiere romperse así.


9. El frío pagará, la lluvia pagará, pagará el trueno.
9.1 ¿Cumple alguien la ley?
9.2 ¿Alguien se duele?
9.3 ¿Alguien se llena de sangre o de odio?
9.4 ¿Alguien ejecuta una venganza o una promesa?
9.5 ¿Qué enemigo tendría tanto odio para cometer un acto de tamaña brutalidad, oficial?
9.6 ¿Quién muere una y otra vez, y, luego, otra más?
9.7 ¿Quién carga el peso del muerto sobre los hombros sobre los ojos las manos las uñas los labios?




[Pieza de apropiación radical con textos de Alejandra Pizarnik, Luz María Dávila y Cristina Rivera Garza]

Te conozco de cuando eras árbol



¿Cómo es posible que alguien como yo haya dejado entrar en su casa 
a una mujer desconocida en una noche de tormenta?
¿Cómo es posible que alguien como yo
no haya podido
no haya querido
desviar la vista del hueso de la cadera
ése que asomaba bajo el borde desbastillado de la camiseta 
y sobre la pretina de la falda floreada?
Es posible que yo la deseara. 
Es posible que yo también la deseara.
Convalecer es un verbo que me produce escalofrío. 
Dije: pensaba en ti y agucé el oído.
Convalecer es un verbo que atestigua lo que escapa.
Mencioné algo sobre abolir la transparencia.
Una cierta desmesura. 
Mencioné algo sobre pelícanos. Su vuelo. La ingravidez.
Es posible que yo estuviera por desaparecer o desapareciendo.
Como un país que se parece más a sus nubes. 
Como un par de forajidas.
Es posible, sí, que hubiese sido yo quien envió esos telegramas, quien atestiguó el umbral y la puerta que se abrió y la mirada sobre el borde y la pretina ¿qué océano es éste?
Sólo un desaparecido podría llegar de la manera en que ella.
Es posible que yo te deseara justamente por eso
la imprecisión de tu llegada / ése no saber de ti misma
la forma en que al desaparecer tú
desaparecía todo.
Es posible que la mujer que no pudo desviar su vista fuese también yo. 
Me di cuenta cuando nos miramos.
Me di cuenta cuando no pude o no quiso desviar su mirada de mi cadera, del borde desbastillado y la pretina floreada.
Es posible que esa mujer fuese yo cuando fui el limbo a donde llegaban los heridos de muerte que, sin embargo, no podían morir.
Convalecer es un verbo plagado de fisuras.
Convalecer no es, en modo alguno, redimir.
Dije: me gustaría culpar a Amparo Dávila por esto. 
Me gustaría culpar a Juan Escutia.
Cualquier cosa sirve para negar la realidad.
El primer recuerdo en el que aparece el yo es el recuerdo de una pérdida. 
Un extravío. 
El primer recuerdo es un discurso vacío. 
Yo estoy perdida, dije.
Me gustaría culpar a la mujer desconocida que dejé entrar a mi casa una noche de tormenta. Me gustaría convalecer como quien se culpa a sí mismo de una falta no cometida.
Es posible que yo estuviera mirándome escribir todo esto mientras balbuceo algo sobre pelícanos y fisuras. Es posible que yo estuviera balbuceando algo sobre escribir acerca de pelícanos mientras las fisuras, mientras el deseo, mientras la escritura.
No me trajo la casualidad. También soy esa que habla por mí. La que miro, invisible, desde la esquina de un limbo artificial. También soy la que no sabe que ahí.
Es posible también, que yo hubiera revisado los archivos todos. 
Que extrajera el historial clínico de un hombre efímero.
Convalecer es un verbo que aísla.
Nadie había escuchado reírse de tal manera a los moribundos.
Me gustaría culpar a las Urracas.
Me gustaría decir que fueron en realidad las Emisarias las que Incrédulas.
Convalecer es un verbo que conmina.
No se pueden hacer muchas cosas sobre la cama de un hospital.
Hablar de la lluvia como quien escucha un eco de tacones sobre la escalera.
Hablar con la lluvia sobre el eco de tus tacones sobre la escalera.
Preguntarse cómo es posible que hayamos dejado entrar en nuestra casa a una mujer desconocida en una noche en la que no había ni rastros de lluvia.
Recordar cuando éramos ese jabalí arrastrando un caballo muerto.
Recordar que Ulises partió de regreso a Ítaca después de la guerra
y llegar, inevitablemente, a la conclusión de que uno de los significados de la palabra limbo es frontera.
Verse a uno mismo cerrando la puerta de una casa, de una penumbra.
Verse a uno mismo hablando a solas con el recuerdo de una mujer que solía hablar en voz alta consigo misma.
El eco de tus tacones sobre la escalera.
Verse a una misma abriendo una ventana. Ese umbral. La inevitabilidad de ese destino.
Ver el vuelo cadencioso de una parvada de pelícanos al final del atardecer.
El eco de tus tacones sobre la escalera.
Perderse para recordar, unos treinta años después, el momento de la pérdida.
La tinta: endeble: desapareciendo. El paisaje que se va.
Sí, en efecto, uno puede retroceder. Pero retroceder no sirve de nada.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Todo empieza en realidad por querer saber más



Now.
Not now.
And now.
Now.
Gertrude Stein


La anécdota es simple: una mujer encuentra a un hombre ¿muerto? bajo una roca en el desierto. ¿Por qué narrar una historia de amor donde el protagonista es el lenguaje? ¿Por qué narrar? ¿Por qué es la voz que narra un hombre, una mujer, una mujer-hombre, un ventrílocuo? ¿Interviene aquí la reconstrucción de fragmentos? ¿Interviene? ¿interviene la voz, los fragmentos? Interviene, sí, la voz que habita distintos cuerpos, que puede migrar de cuerpo a cuerpo, la voz que habla por otro y la voz que emprende una larga trayectoria que va del sonido a la escritura ¿cómo se narra un desmayo, una voz, cómo se narra una anécdota simple en la que una mujer encuentra a un hombre "muerto" bajo una roca en el desierto? ¿cómo la urgencia por la orilla de la orilla de la orilla de la orilla? La anécdota es simple: "El amor siempre ocurre después, en retrospectiva. El amor es siempre una reflexión / un halo de bondad o de daño / luego entonces, el que cuenta sueños, traiciona [trastoca]: reescribe".

Esta es la historia de cómo una mujer está siendo tocada por la muerte. Esta es la historia. Ese ir y retroceder. Ese no saber. La historia de una mujer que visita otro planeta. Ésa historia. Ese estar a punto de evocar o de unir. Y la manera de quedarse quieto. Y la historia de una mujer contando la historia de un hombre que es sólo una mujer. Y la historia de esta pausa, de este titubeo. Esta es  la historia de quienes siempre se quedan en los andenes, de quienes se preguntan cómo comenzó el desierto. Y la historia de la habitación de las palabras. Y la historia de la habitación de las palabras. Y de quienes se preguntan cómo comenzó el desierto. Es esta la historia de los que siempre quisimos saber:

a) las posibilidades de la discontinuidad histórica
b) las históricas posibilidades de la discontinuidad
c) las posibilidades de la historia discontinua
d) la historia discontinua de las posibilidades
e) la discontinua posibilidad de la historia
f) todas las anteriores

Porque yo quise saber más, ella quiso saber más, tú quisiste saber más. Porque nunca estuve segura, en realidad, de cuál era el inicio, de si éste es o no el inicio. ¿Aquí? Una mujer que lleva a casa al hombre moribundo del desierto. ¿Aquí empieza el lenguaje? ¿Acaso esto era curar, era el amor, era el lenguaje, esta intrusión, esta yuxtaposición, esta irrupción súbita y premeditada? Aquí el desierto (la nada), una habitación (la nada), una terraza (la nada), un restaurante (la nada), Nueva Orléans o Nuevo Urano o Nuevo Saturno, tal vez Nueva Lisboa, tal vez el trópico, tal vez la nada. La anécdota es simple, es ficticia, es simple (es ficticia): una mujer escribe una novela sobre una mujer que escribe novela sobre una mujer que encuentra a un hombre ¿muerto? bajo una roca en el desierto. Cito: "No se narra para decir. No se narra para comunicar. Se narra para producir una sospecha de realidad. Narrar es una forma de demencia que se llama escritura, que es una forma de demencia que se llama pensamiento, que es una forma de demencia que requiere de narrarse a sí mismo. Sólo los habitados narran. Narrar es una habitación".

No pretender explicar nada sobre el amor. No pretender. No articular. No balbucear. No dirigir. No digerir. No conjugar. Esto no es una historia. La anécdota es simple: un desierto encuentra a una mujer bajo la roca de un hombre. Esta es la historia en la que un hombre se desvanece. Esta historia contiene el desvanecimiento de un hombre. La esquina donde los fantasmas del mundo deletrean el cuerpo de lo que no está.